La elección de gobernador en Coahuila estaba cantada desde hace tiempo, y entre la fuerza del candidato de la alianza Va por México con el priista Manolo Jiménez al frente, y la división de la oposición de izquierda, dieron al aspirante del tricolor una cómoda victoria con más de la mitad de sufragios del total de votos computados.
Con esto el PRI, aunque ahora en coalición, seguirá gobernando Coahuila, como ha ocurrido siempre.
La ventaja es tal, que el aspirante de Morena, Armando Guadiana, quien va segundo en las votaciones con un estimado del 20% de los votos, prácticamente ha reconocido su derrota.
A su vez, el aspirante del Partido del Trabajo, Ricardo Mejia Berdeja, es tercero con poco más del 10% de los sufragios, y el abandonado abanderado del Partido Verde, Evaristo Lenin Pérez, poco más del 5%.
Mejía denunció irregularidades pero no hay nada que pueda cambiar las tendencias.
Sin embargo, el porcentaje de participación ciudadana fue bajo y no llegó ni a la mitad del padrón, quizás por el desencanto de la población ante la falta de alternativas atractivas al priismo, hoy coaligado.
Prácticamente le quedan al tricolor solo 2 gubernaturas, pues excepto Durango y ahora Coahuila, que solo registra derrotas bajó la gestión de Alejandro Moreno como presidente.
