Para el presidente de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, no hay motivos para alarmarse con la llegada de la variante Ómicron del coronavirus, para los estadounidenses vacunados.
El mandatario se refirió el martes a la nueva cepa del Covid, y afirmó que Estados Unidos está "preparado" frente a la variante del coronavirus, y en un mensaje televisado, señaló que "esto no es marzo de 2020", precisando que 200 millones de personas están completamente vacunadas.
“Estamos preparados, sabemos más. Solo tenemos que seguir enfocados", expresó Biden, y apuntó que es un "deber patriótico" vacunarse, añadiendo que su antecesor, el republicano Donald Trump, ya se puso la tercera dosis de la vacuna, y “es lo único responsable que podemos hacer".
Biden prometió que no habrá cierre masivo de escuelas o negocios para enfrentar la eventual ola de infecciones, y puntualizó que aunque sabe que la gente está cansada y frustrada “todos queremos que esto termine, pero todavía estamos en ello".
El gobierno desplegará mil militares con formación médica para apoyar a hospitales saturados, así como ambulancias y equipos médicos para el traslado de pacientes. También se dispondrá una página web para que los ciudadanos pidan sus pruebas de COVID-19, que se les serán enviadas directa y gratuitamente.
Un nuevo sondeo realizad por PBS NewsHour/NPR/Marist, indica que el 55% de los encuestados reprueba el trabajo del presidente Joe Biden al frente del Gobierno de Estados Unidos. En cambio, apenas 41% respaldan la labor de Biden en la Casa Blanca, en su mayor parte simpatizantes demócratas.
Las elevadas cifras de desaprobación por la gestión de Biden están los temores derivados del aumento de precios y una inflación no registrada en Estados Unidos en los últimos 40 años.
También influye en el ánimo de los encuestados la aparición de la variante Ómicron, que amenaza con disparar el número de casos de coronavirus, según Lee Miringoff, director del Instituto Marista de Opinión Pública de la Universidad Marista de Nueva York.
