Amenaza Hamás con "pena máxima" a quien colabore con Fundación que reparte ayuda

El gobierno de la Franja de Gaza que maneja el grupo islamista Hamás, no está dispuesto a colaborar en nada con la llamada Fundación Humanitaria para Gaza.

Por ello, prohibió a la población tratar, trabajar o proporcionar cualquier tipo de asistencia" a esa entidad, y de plano, amenazó con la pena máxima, a cualquiera que colabore con ella.

El Ministerio del Interior y Seguridad Nacional del enclave palestino señala en un comunicado que "queda estrictamente prohibido tratar, trabajar o proporcionar cualquier tipo de asistencia o cobertura con la fundación americana o sus agentes locales o extranjeros".

Las autoridades de la Franja advirtieron sobre la imposición de "las penas máximas estipuladas en la legislación nacional aplicable", que es de facto la pena de muerte para toda persona que coopere con la organización estadounidense, desde el comienzo de la ofensiva israelí en Gaza.

Según Hamás, esto se produce al constatar que la fundación se ha convertido "en una trampa mortal masiva, un centro de humillación y de violación sistemática de la dignidad y los derechos humanos, ajeno a cualquier supervisión internacional o legal".

Más de 500 personas han muerto y otras 4 mil resultaron heridas mientras trataban de acceder a la ayuda, sostienen las autoridades gazatíes, desde que el nuevo sistema de reparto de ayuda, autorizado por Israel y Estados Unidos, operado por la Fundación Humanitaria para Gaza, empezó a operar en Gaza desde finales de mayo,

"Ha quedado claro que esta organización no se creó con el propósito de brindar socorro ni aliviar el sufrimiento de nuestro pueblo asediado y hambriento", aseguran las autoridades gazatíes.