Luego de la difusión de los resultados de un estudio del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina en donde se estima que en enero de 2024 la pobreza alcanzó a un 57,4% de la población, cifra superior a la de hace 20 años que era del 54,8%, la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner acusó a los gobiernos de Javier Milei y de Mauricio Macri por el aumento de la pobreza.
De acuerdo con el estudio, que el mandatario ultraderechista calificó como "la herencia de la casta", el índice de indigencia total también se incrementó, pasando del 14,2% en diciembre de 2023, al 15% en el primer mes de este año.
Según Fernández, "si fuera el Juego de la Oca, al mirar el gráfico del Observatorio, más que un retroceso a mansalva estaríamos viendo cómo, a partir del año 2018, con endeudamiento en dólares y regreso del FMI de la mano de Mauricio Macri, volvimos para atrás hasta caer en el punto de partida"
Más aun, la también exvicepresidenta durante la gestión de Alberto Fernández, sostuvo que "la realidad que muestra este trabajo es que hoy ya estamos peor que en el año 2004", año en la que asumió el poder la viuda del expresidente Néstor Kirchner. Según los datos, desde 2004 el nivel de pobreza cayó hasta el 25,9 % en 2011 y, tras altibajos, volvió a subir abruptamente desde 2017, durante el gobierno del derechista Macri.
Cristina señaló que "sin embargo, la verdadera tragedia es que no están jugando un juego de mesa, sino con la mesa de los argentinos".
El estudio dado a conocer estos días, no presenta el dato cerrado para el año pasado, pero proyecta que la pobreza habría alcanzado a finales de diciembre, después de la llegada de Milei con su plan de ajuste, el 49,5%, y que en enero de 2024 sería de 57,4%.
El sábado pasado, Milei comentó el estudio, y no quiso referirse a los números proyectados para el período en que ya había llegado al poder que estiman un aumento de cerca de 10 puntos porcentuales, pero declaró que "la verdadera herencia del modelo de la casta: 6 de cada 10 argentinos son pobres. La destrucción de los últimos 100 años no tiene paragón en la historia de Occidente", aseguró.
El agresivo plan de Milei incluye una importante devaluación y recortes en subsidios al transporte y a la energía, que ya se reflejan en la inflación, que castiga especialmente a los más pobres.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos informó la semana pasada que el país registró en enero un índice de inflación de 20,6%, acumulando el 254,2% interanual, pero el Gobierno de Milei aseguró que su administración no era responsable de las cifras, sino que se trata de una situación "heredada".
