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Cerca de 4 mil elementos policiacos y militares portando fusiles, cascos y chalecos antibalas, cercaron el miércoles sectores de las ciudades salvadoreñas de Apopa y Soyapango para detener a miembros de pandillas, en el marco de la política de seguridad del presidente Nayib Bukele.
En el caso de Apopa, tiene una población de 131 mil habitantes, está a solo 13 kilometros al norte de San Salvador, y registra fuerte presencia de las bandas Mara Salvatrucha y Barrio 18.
En Soyapango, el operativo se dirige a la comunidad de La Campanera, localizada en la periferia noreste de la capital, a 12 kilómetros de San Salvador y segunda ciudad más poblada del Área Metropolitana de la capital salvadoreña.
Bukele dijo que el operativo, similar a otros realizadas en los últimos 2 meses en otras ciudades, se encuadra en la fase "Extracción" del Plan Control Territorial, que se ejecuta desde 2019 y busca mandar a la cárcel a las pandillas.
El ministro de la Defensa, René Francis Merino, señaló que el cerco militar "responde a un llamado de la población que indica que hay algunos pandilleros tratando de reorganizarse" en la zona".
"No vamos a detenernos hasta capturar al último terroristaque quede. No permitiremos que pequeños remanentes se reagrupen y nos quiten la paz que tanto nos ha costado", adivirtió Bukele, cuya política de seguridad a costillas de garantías individuales, sigue siendo foco de críticas