Cualquier asalto de las fuerzas israelíes a la densamente poblada ciudad de Rafah, donde 1,5 millones de personas han buscado refugio tras un desplazamiento masivo, aumentará enormemente el riesgo de crímenes atroces, advirtió este viernes el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk.
Su portavoz, Jeremy Laurence, declaró a periodistas en Ginebra que una situación ya de por sí catastrófica podría "hundirse más profundamente hacia el abismo" en los próximos días si las fuerzas israelíes avanzan sobre la ciudad fronteriza del sur, cumpliendo su amenaza de invadirla a menos que los militantes de Hamás entreguen a los rehenes restantes antes del comienzo del Ramadán.
El mes sagrado para los musulmanes de todo el mundo comienza este fin de semana, un "periodo destinado a honrar la paz y la tolerancia", dijo Laurence.
Los habitantes de Gaza, que no tienen otro lugar al que huir, viven en Rafah en "condiciones infrahumanas deplorables", señaló el portavoz, añadiendo que "cualquier asalto terrestre a Rafah supondría una pérdida masiva de vidas humanas y aumentaría el riesgo de nuevos crímenes atroces".
"No debemos permitir que esto ocurra. También tememos que nuevas restricciones israelíes al acceso de los palestinos a Jerusalén Este y a la mezquita de al-Aqsa durante el Ramadán puedan exacerbar aún más las tensiones".
El responsable de derechos humanos repitió que "debe haber un fin inmediato a este conflicto y que la matanza y la destrucción deben cesar".
Los rehenes secuestrados por Hamás y otros militantes durante los ataques del 7 de octubre han soportado 150 días de sufrimiento y tormento, añadió Türk, pidiendo su liberación y regreso incondicionales.
Al proseguir su ofensiva, Israel, como potencia ocupante, "debe, repetimos, cumplir plenamente sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario de proporcionar a la cada vez más desesperada población civil de Gaza los alimentos y suministros médicos necesarios o, si no puede hacerlo, garantizar que la población tenga acceso a una asistencia humanitaria esencial para salvar vidas acorde con sus necesidades", subrayó Laurence.
Además, deben abrirse plenamente los pasos y corredores fronterizos y deben tomarse medidas para garantizar la circulación libre y segura de los convoyes de ayuda a la población civil, dondequiera que se encuentren.
Según la última actualización de la situación de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, entre el jueves por la tarde y el viernes por la mañana, 78 palestinos murieron y 104 resultaron heridos, según cifras del Ministerio de Sanidad de Gaza.
Esto eleva el total de víctimas mortales en Gaza al menos a 30 mil 878, con 72 mil 402 palestinos heridos.
Según la Organización Mundial de la Salud, se calcula que hay que evacuar médicamente a 8 mil pacientes de Gaza, de los cuales unos 6 mil padecen traumatismos diversos.
Este viernes, Día Internacional de la Mujer, la Agencia para los Refugiados Palestinos, señaló que las mujeres de Gaza “siguen sufriendo las consecuencias de esta guerra brutal”. Según el organismo, al menos 9 mil mujeres han muerto, y muchas más están bajo los escombros desde el 7 de octubre.
“En Gaza mueren una media de 63 mujeres al día: 37 son madres que dejan atrás a sus familias”, añadieron.
Este Día Internacional no existe para las mujeres palestinas, por mucho que los líderes mundiales se lleven la boca de elogios para la mujer en el mundo.
Mucha hipocresía.
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