En lugar de buscar resolver por medios diplomáticos una crisis que lleva más de medio siglo, Estados Unidos reaccionó a la guerra de Israel con Palestina de la única manera que conoce, y es mediante el uso de las armas. Política y negocio.
El primer avión con municiones estadounidenses arribó a Israel el martes informaron las Fuerzas Armadas israelíes citadas por medios norteamericanos.
Horas antes, en conferencia de prensa, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que Washington ofreció ayuda militar y municiones para el operativo lanzado por Israel el 7 de octubre tras los ataques de Hamás, para que no se quede sin suministros.
Biden, necesitado de acciones que eleven sus niveles de aprobación a un año de las elecciones y con problemas legales en casa y la guerra en Ucrania afuera, ha dicho que "nos aseguraremos que Israel tenga todo lo que necesita para proteger a sus ciudadanos y defenderse (...). Estamos listos para desplegar recursos adicionales cuando sea necesario".
Por su parte, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aseguró que sostuvo una nueva conversación telefónica con Biden, en la que agradeció su apoyo incondicional y le aseguró que será "necesaria una campaña prolongada y poderosa en la que Israel ganará.
El gobierno israelí ha recibido municiones para defenderse de Hamás, aunque en realidad ha pasado a la ofensiva y lanzado 2 mil municiones y más de mil toneladas de bombas sobre Gaza
Mientras tanto, el Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, viajará el 11 de octubre a Israel en medio de la escalada entre ese país y Palestina.
Blinken visitará territorio israelí para conversar con el liderazgo judío para analizar el actual conflicto, anunció el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
