El letal golpe del huracán Otis en México encendió las alertas en El Salvador: la temporada de ciclones 2023 en el Pacífico no ha terminado, y las tormentas tropicales llegan a El Salvador, por lo que la Dirección General de Protección Civil ha decretado la alerta de emergencia "a nivel nacional".
La depresión tropical 19-E, que mantiene lluvias y tormentas en todo el país, lo que ha llevado a esa entidad gubernamental a dejar sin efecto desde la noche del domingo la alerta naranja establecida para la zona costera del país centroamericano y el Área Metropolitana de San Salvador, y la amarilla para el resto del país.
El presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, convocó a una sesión extraordinaria para que los diputados aprueben un decreto de estado de emergencia nacional a solicitud del presidente Nayib Bukele, luego de que, según información del Observatorio de Amenazas del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la depresión tropical "se ubica al suroeste de la costa de El Salvador".
Ante esto, Protección Civil llama a la población a transitar con precaución sobre la vía pública cuando se presenten lluvias, tener precaución al conducir por la noche y no cruzar ríos, quebradas, canales o "cualquier corriente de agua que se genere durante una tormenta".
A su vez, el Ministerio de Educación informa que las clases presenciales y virtuales en los sectores público y privado, y las actividades académicas quedan suspendidas hasta el 1 de noviembre, acción que aplica también para las instituciones de educación superior públicas y privadas.
Las autoridades no han reportado víctimas o daños materiales por las lluvias presentadas en las últimas horas, sobre todo en el oriente y occidente de El Salvador. El desastre en Acapulco es un llamado de atención ante este tipo de fenómenos, cada vez más peligrosos e impredecibles debido al cambio climático.
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