Medios locales de Texas, reportan que la Oficina del Médico Forense del condado de Bexar determinó que el empleado de una empresa que da servicio en el Aeropuerto Internacional de San Antonio y que murió al ser succionado por el motor de un avión, cometió suicidio.
A su vez, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos fijó postura y sostuvo que "no abrirá una investigación sobre este evento", alegando que no hubo problemas de seguridad ni con el avión ni con el aeropuerto.
Las autoridades texanas indicaron que el occiso, David Renner, de 27 años de edad, perdió la vida el pasado viernes debido a las lesiones y heridas punzantes sufridas tras ser succionado por un motor a reacción, cuando el avión de la aerolínea Delta Airlines se dirigía hacia la puerta de embarque tras llegar procedente de Los Ángeles.
La víctima trabajaba para la empresa Unifi Aviation, contratada por la compañía aérea para brindar operaciones terrestres.
Delta Airlines dijo en un comunicado que estaba "desconsolada y afligida" por la muerte de Renner, en tanto que Unifi Aviation declaró que llevará a cabo muestras de duelo por la pérdida de su empleado en el lugar de la tragedia hasta el martes.
