top of page
  • bambarito59

Dura critica del Papa Francisco ante crisis migratoria en el Mediterráneo



En presencia de varios líderes religiosos ante el Memorial de los marineros y migrantes dispersos en el mar en Marsella, el Papa elevó su pensamiento los hermanos y hermanas “ahogados en el miedo, junto con las esperanzas que llevaban en el corazón”.


El pontifice viajó el viernes a esa zona de Europa, en donde dijo que estamos ante una encrucijada: fraternidad o indiferencia, encuentro o confrontación, y señaló que no podemos resignarnos “a ver seres humanos tratados como mercancía de cambio”.


Para el obispo de Roma, es un deber de humanidad, de civilización, socorrer a las personas que corren el riesgo de ahogarse en el mar, y advirtió que no debemos acostumbrarnos a considerar los naufragios como noticias ni a los muertos como cifras: ellos son rostros e historias, vidas rotas y sueños destrozados.


Dijo el vicario de Cristo que ante esta “encrucijada de civilización”, por un lado, de fraternidad, y por el otro de indiferencia, “no podemos resignarnos a ver seres humanos tratados como mercancía de cambio, aprisionados y torturados de manera atroz; ni seguir presenciando los dramas de los naufragios, provocados por contrabandos repugnantes y por el fanatismo de la indiferencia”.


Francisco reiteró esto en el momento de recogimiento con los líderes religiosos, en su Viaje Apostólico a Marsella con motivo de los Encuentros del Mediterráneo.


Agradeciendo, ante todo, a cuantos se reunieron en memoria de “aquellos que no sobrevivieron, que no fueron salvados”, el Papa piensa en los numerosos hermanos y hermanas “ahogados en el miedo, junto con las esperanzas que llevaban en el corazón”, y expresó que drente a semejante drama, no sirven las palabras, sino los hechos.


“Pero antes, hace falta humanidad: silencio, llanto, compasión y oración”, aseguró

El pontífice pidió dejarse “conmover” por la tragedia de “demasiadas personas”, que “huyendo de los conflictos, la pobreza y las catástrofes naturales,” encuentran entre las olas del Mediterráneo el rechazo definitivo a su búsqueda de un futuro mejor.


*Este mar", dice Francisco, “se ha convertido en un enorme cementerio”, donde muchos se ven privados “incluso del derecho de tener una sepultura”, mientras que “la única a ser sepultada – dice- es la dignidad humana”.


“El cielo nos bendecirá si en la tierra y en el mar sabremos cuidar de los más débiles, si sabremos superar la parálisis del miedo y el desinterés que condena a muerte con guantes de seda", expresó.


“Ya basta de tener miedo a los problemas que nos plantea el Mediterráneo!", sostuvo el papá, y advirtió que, para la Unión Europea y para todos nosotros, nuestra supervivencia depende de ello.”

logotipo.png
cartel-de-los-juegos-olimpicos-de-paris-2.jpg
bottom of page