Cuando la dignidad es desechable puede haber cosas como esta:
La excandidata presidencial argentina, Patricia Bullrich, anunció su respaldo al ultraderechista Javier Milei para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del próximo 19 de noviembre.
Milei se enfrentará al peronista Sergio Massa, candidato del oficialismo argentino.
Según Bulrich, "la urgencia del momento nos interpela a no ser neutrales frente al peligro de la continuidad del kirchnerismo a través de Sergio Massa".
En conferencia de prensa, dijo que ella y Milei se perdonaron los graves insultos que intercambiaron durante la campaña previa a la primera vuelta.
La política volvió a arremeter contra el Gobierno y en particular a Massa, con términos como decadencia, corrupción, "capitalismo de amigos", burocracias, "mafias", "discrecionalidad del poder", "defensa de los delincuentes" y la inflación.
Bulrich recurrió a toda clase de dichos para justificar su apoyo a Milei, además de afirmar que "tenemos diferencias, por eso hemos competido, no las ocultamos, pero nos encontramos ante el dilema de cambio o continuidad de las mafias, tenemos la obligación de no ser neutrales".
Bullrich y el expresidente Mauricio Macri, considerado el principal responsable de la grave crisis financiera que vive Argentina, acordaron apoyar a Milei durante una cena que sostuvieron con el ultraderechista.
Macri y Bullrich consolidaron la alianza que quisieron formar con el candidato de La Libertad Avanza antes de las elecciones primarias de candidatos presidenciales en agosto.
Durante la campaña, Milei insultó a Bullrich, a Macri y a su partido de manera reiterada.
La acusación más grave fue la de "montonera asesina que puso una bomba en un jardín de infantes" que Milei le hizo a Bullrich en alusión a su pasado como integrante del grupo Montoneros, una guerrilla de los años 70.
Pero ..el poder permite a los políticos dejar la dignidad en el bote de la basura.
Bullrich enfatizó que su posición era como excandidata presidencial y no a nombre de su partido.
"Esperemos que esto no signifique una ruptura del diálogo interno", dijo la política, toda vez que la mayoría de los dirigentes de Juntos por el Cambio rechazaron públicamente cualquier acercamiento con Milei.
Con respecto a la controversia por aliarse con alguien que la insultó tanto, Bullrich advirtió que prefiere dejar eso atrás.
Luego de la primera vuelta de las elecciones presidenciales, la encuestadora CB Consultora Opinión Pública realizó un estudio en línea ante el balotaje del 19 de noviembre.
"Se ve un empate técnico con una pequeña ventaja de Javier Milei, que está en 50,7 % y Sergio Massa con 49,3 %", dijo la encuestadora , y agregó que en el caso del 23,8% de los votos que obtuvo la derechista Patricia Bullrich en la primera vuelta, un "gran porcentaje" no votará o lo hará en blanco.
