Apenas 4 minutos estuvo en el campo de juego Aaron Rodgers, y se acabó su temporada de presentación con los Jets de Nueva York: caído pero no vencido porque piensa seguir jugando fútbol americano en la NFL.
En sus primeros comentarios después de sufrir una lesión que lo margina de los emparrillados a sus 39 años de edad, Rodgers asegura en su cuenta de Instagram que "la noche es más oscura antes del amanecer”, y advierte que "me levantaré una vez más”.
La ruptura del tendón de Aquiles izquierdo, redujo su trabajo como mariscal de campo a 4 jugadas el pasado lunes por la noche ante los Bills de Búfalo.
El quarterback de 39 años no había comentado nada públicamente desde que se lesionó en la victoria de los Jets por 22-16 en tiempo extra sobre los Bills de Buffalo.
El pasador agradeció en sus redes sociales "a todas las personas que se acercaron, llamaron, enviaron mensaje de texto o mensaje directo, se conectaron a través de un amigo".
Dijo también que "estoy completamente desconsolado y atravesando todas las emociones, pero profundamente conmovido y honrado por el apoyo y el amor que me muestran. Por favor, manténganme en sus oraciones y pensamientos mientras comienzo hoy mi proceso de recuperación”.
Rodgers añadió su mensaje refiriéndose al desenlace del partido con un “Orgulloso de mis muchachos, 1-0”.
El exmariscal de campo de Green Bay tendrá por delante una larga recuperación.
Cumple 40 años en diciembre y para cuando intenté regresar va a tener 41.
Ahora, no podrá contribuir en el campo, pero los Jets desean que ayude al equipo a poner fin a la ausencia de la postemporada al seguir conectado con sus compañeros y entrenadores.
Los Jets depositarán confianza en Zack Wilson para reemplazar a Rodgers, quien encara una larga y ardua recuperación y rehabilitación de la lesión. Cumplirá 40 años en diciembre y ha considerado retirarse en el pasado.
En febrero decidió que quería seguir jugando, y que quería hacerlo con los Jets. (AP)
