Traslado de venezolanos a cárcel salvadoreña, en medio de ilegalidades y burlas presidenciales

Los salvadoreños ya no son mundialmente conocidos por las violaciones a las garantías individuales por parte de su gobierno, y por tener una de las cárceles mas inhumanas del planeta, medallas que avergonzarían a muchos pueblos y gobiernos.

Ahora también se habla de El Salvador en el mundo por las violaciones al derecho internacional y la burla en redes sociales de su presidente Nayib Bukele hacia el sistema de justicia de Estados Unidos. Normal, porque se sabe protegido por otro violador de la ley, el presidente convicto, Donald Trump.

Poco más de un mes después de la oferta que el presidente Bukele le hizo al jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio de ubicar a delincuentes de Estados Unidos en su mega cárcel CECOT, Washington despachó el primer vuelo de "reos" a la capital del país centroamericano con aterrizó con 261 personas.

Para mostrar al mundo la eficacia de su sistema policiaco y de seguridad, Bukele, que al igual que Trump controla el Congreso y el poder judicial en su país, produjo un video donde quiso presumir en redes la dureza de su sistema desde el aeropuerto hasta la mega cárcel CECOT:

Mas allá del alarde de gobierno tercermundista de Bukele, quien cabe recordar manipuló la constitución de su país para reelegirse, el hecho es que 137 de los deportados por Estados Unidos, fueron expulsados al amparo de la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 por pertenecer supuestamente a la organización criminal Tren de Aragua.

Esta ley solo se ha invocado 2 veces en la historia del país, todas en tiempos de guerra, lo que no sucede ahora. En el avión iban también 101 venezolanos deportados además de 23 delincuentes salvadoreños, incluyendo 2 cabecillas de la pandilla Mara Salvatrucha.

No solo Trump pasa por encima de la ley en el país que dice ser el paraíso de la democracia, sino que hasta el propio presidente de El Salvador se burló en su cuenta de X de la orden del juez federal James Boasberg que bloqueó el uso de esa legislación durante 14 días y ordenó el regreso de las personas trasladadas.

El fallo judicial se dio cuando ya volaban los deportados sobre aguas internacionales, cosa que aprovechó el presidente salvadoreño para escribir en sus redes' "Ups, demasiado tarde”, junto un emoticón riendo a carcajadas.

Y esto, lo toleran los estadounidenses. Una burla a su poder judicial por parte de un presidente extranjero.

El traslado a la cárcel CECOT en El Salvador plantea varias preguntas, entra las que resaltan'

¿De qué delitos se acusa exactamente a estas personas? ¿Han sido ya procesadas? ¿Cuáles son las pruebas? ¿Qué derecho a la defensa se les garantiza?

Juanita Goebertus, directora para las Américas de Human Rights Watch, dijo al medio alemán de que "sl Gobierno de Trump afirma que estas personas son pandilleros venezolanos, pero no ha revelado sus nombres ni ha aportado ninguna prueba de que hayan cometido delitos en Estados Unidos”.