El canciller Marcelo Ebrard se reunió con el Secretario de Seguridad Nacional estadounidense Alejandro Mayorkas en Washington, y las desavenencias entre México y el gobernador de Texas salieron a la mesa.
El gobernador Greg Abbott, aseguró que estudia declarar el problema de la migración ilegal como una invasión para asumir facultades como si estuviera en una guerra, y la declaración no fue bien recibida por el Gobierno de México.
De hecho, el presidente Andrés Manuel López Obrador lo llamó a bajarle una raya a sus expresiones, y el propio Ebrard acusó al gobernador Abbott de extorsionar a los gobernadores fronterizos mexicanos para sacarles convenios encaminados a frenar la migración ilegal
Ebrard, se reunió con el Secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, en donde, abordaron el tema de Texas y cómo el comercio se ha visto afectado debido a las medidas implementadas por el mandatario republicano.
Texas puso en operación en abril inspecciones a camiones procedentes de México, lo que provocó daños económicos a varias empresas debido al enorme retraso en el traslado de mercancías.
Luego de su reunión con Mayorkas, el Jefe de la Unidad para América del Norte de la cancillería mexicana, Roberto Velasco, informó que se habló sobre alternativas legales y de infraestructura con el estado de Nuevo México para tener otras opciones comerciales ante el conflicto con Texas.
La medida, de hacerse realidad, tendrá costos económicos para Texas, cuyo gobernador quiere quedar bien con electorado a propósito de los comicios ios intermedios de noviembre venidero
De hecho, la secretaria de Economía de México, Tatiana Clouthier, ya habló sobre un eventual cambio de ruta comercial para no depender de Texas, "no dejar los huevos en una sola canasta y ser rehenes de quien quiere utilizar el comercio como una medida política".
"Hay un proyecto importante que estoy segura empezará a llevarse a cabo muy pronto que conecta desde Sinaloa, y decía hasta Texas, pero creo que ya no vamos a usar Texas; agrego Clouthier.
Foto. archivo gobernadores de Texas y Chihuahua
