Retira Estados Unidos ayuda a grupo global de vacunación Gavi

Para el secretario de Salud de Estados Unidos, Robert F. Kennedy Jr., un escéptico de las vacunas la alianza mundial de vacunación conocida como Gavi,ha “ignorado la ciencia” y “perdido la confianza de la población”, por lo que anunció que el país de las barras y las estrellas retirará su apoyo

Esto se produjo durante una reunión de Gavi realizada en Bruselas, donde este grupo que ha financiado la vacunación de más de mil millones de niños a través de programas de inmunización de rutina, esperaba recaudar unos 9 mil millones de dólares para los próximos 5 años, pero ...

En su mensaje grabado para la reunión, Kennedy se refirió a la asociación de Gavi con la Organización Mundial de la Salud durante la pandemia de COVID-19, y la acusó de silenciar “opiniones disidentes” y “preguntas legítimas” sobre la seguridad de las vacunas.

Más aún, este funcionario, que en buena medida se olvida de la salud publica para imponer sus ideas como parte de un gobierno autoritario puso en tela de juicio la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tos ferina, que la OMS y otras agencias de salud han considerado por mucho tiempo como segura y efectiva.

En un comunicado, Gavi señaló que su “máxima preocupación es la salud y la seguridad de los niños”, asegurando que cualquier decisiónsobre las vacunas a adquirir se hace de acuerdo con las recomendaciones emitidas por expertos en vacunas de la OMS.

A diferencia del responsable de Salud en Estados, que es un político, Gavi es una asociación público-privada que incluye a la OMS, UNICEF, la Fundación Gates y el Banco Mundial.

Se calcula que ha salvado cerca de 18 millones de vidas, y tan ha funcionado , que por mucho tiempo, Estados Unidos ha sido uno de sus mayores patrocinadores hasta la reelección de Donald Trump.

La Unión Americana habia comprometido mil millones de dólares hasta 2030, pero ahora, el gobierno del presidente convicto está rompiendo este compromiso como lo ha hecho con muchos otros en apenas 5 meses.

Kennedy llamó a Gavi a “justificar los 8 mil millones de dólares que Estados Unidos ha proporcionado en financiamiento desde 2001”, y argumentó que las autoridades deben “tener en cuenta la mejor ciencia disponible, incluso cuando esa ciencia contradiga paradigmas establecidos”.

Por eso, este funcionario, un reflejo más de lo peligrosa que resulta la ignorancia cuando se tiene poder, afirmó que, hasta que eso suceda, Estados Unidos no contribuirá más a Gavi.

Incluso, se centró en la vacuna contra el COVID-19, que la OMS, Gavi y otras autoridades sanitarias han recomendado para las mujeres embarazadas, diciendo que están en mayor riesgo de sufrir una enfermedad grave.

Recientemente, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Estados Unidos dejaron de recomendarla.

Peor aún, Kennedy criticó a Gavi por financiar una vacuna para prevenir la difteria, el tétanos y la tos ferina en países pobres, diciendo que había visto investigaciones que concluían que las niñas pequeñas que recibieron la vacuna tenían más probabilidades de morir por otras causas que los niños que no fueron inmunizados.

Lástima del apellido...