Podrían recetar medicamentos reguladores de peso en Reino Unido a desempleados obesos

Para el primer ministro británico, Keir Starmer, sería  beneficioso para la economía del Reino Unido que la sanidad pública administre un fármaco para bajar de peso a personas desempleadas con obesidad, con el objetivo de que retornen al mercado laboral,.

Starmer afirmó a la cadena BBC que creia que  este medicamento "podría ser muy importante para nuestra economía y para la salud. Este medicamento será muy útil para las personas que quieren perder peso, necesitan perder peso, es muy importante para la economía, para que la gente pueda volver a laborar.

El premier ve también  la necesidad de reducir la presión sobre el Sistema Nacional de Salud (NHS), por lo que la propuesta se podría considerar.

 Este tipo de inyecciones solo son recetadas por la sanidad pública en el caso de obsesos con problemas de salud y a quienes  tienen diabetes debido a que salen caras, pero el nuevo plan el Gobierno pretende ampliarlo de forma gratuita a más personas que sufren ese problema.

El dirigente laborista se ha manifestado a favor del plan que expuso el ministro británico de Sanidad, Wes Streeting, en un artículo publicado en el diario The Telegraph, en el que señaló wue que "nuestros cinturones cada vez más anchos también están imponiendo una carga significativa a nuestro servicio de salud, costando 11 mil millones de libras al año, incluso más que fumar".

Agregó que "las enfermedades causadas por la obesidad hacen que las personas se tomen 4 días adicionales por enfermedad al año como promedio, mientras que muchos otros se ven obligados a quedarse sin trabajo"

 Así, el Gobierno británico se plantea esta opción a raíz del comienzo de un estudio de la farmacéutica Lilly para conocer la efectividad del fármaco Mounjaro para el tratamiento de la obesidad y su contribución a reducir el desempleo.

Mounjaro es considerado efectivo, luego de que un análisis previo encontró que las personas inyectadas con este fármaco perdieron  21% de su peso corporal en 9 mese, y el Servicio de Sanidad considera que, de llevarse adelante el plan, tendrá que ser escalonado, debido a que se prevé una elevada  demanda.