
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro declara una vez ante la Policía Federal, y ahora no se trata del intento de socavar las elecciones que perdió en octubre de 2022 o del intento de golpe el 8 de enero pasado
Está vez, lo hará en el marco de la investigación por el posible fraude con cartillas de vacunación del Covid-19 en el Ministerio de Salud, y en donde el mismo, familiares y ayudantes, se habrían beneficiado.
La Policía busca conocer si Bolsonaro estaba enterado de este esquema y si dió la orden de acceso al sistema del Ministerio de Salud.
El ultraderechista fue citado a declarar el 3 de mayo, luego de que la Policía cateó su residencia en Brasilia. Sus abogados dijeron que no acudiría, porque sus abogados no habían tenido acceso a los informes del caso. En el cateo, fueron detenidos el exayudante de Bolsonaro, teniente coronel Mauro Cid Barbosa y a 2 miembros de su personal de seguridad, Max Guilherme y Sergio Cordeiro.
Para la Policía Federal brasileña, los detenidos son sospechosos de introducir información falsa en el sistema del Ministerio Público para emitir certificados de vacunación entre noviembre de 2021 y diciembre de 2022, con el objetivo de viajar a Estados Unidos, a dónde se dirigió Bolsonaro con su familia y ayudantes el 30 de diciembre de 2022, antes de la toma de posesión de Luiz Inácio Lula da Silva.
El día del allanamiento de su vivienda, el exmandatario volvió a afirmar que nunca se vacunó, y dijo que "yo no me vacuné. Nunca me pidieron una tarjeta de vacunas. No hay manipulación de mi parte". Desde el inicio de la pandemia, Bolsonaro minimizó la gravedad del covid-19, y se negó a aplicar cualquier medida sanitaria radical para contenerlo.
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