
Luego de haber sido arrestado por posible caso de violencia doméstica el pasado mes de septiembre, hecho que propinó un duro golpe a su carrera, el mexicano Julio Urías, exlanzador de los Dodgers de Los Ángeles no será imputado con cargos por delitos graves.
De acuerdo con la evaluación de cargos realizada por de la oficina del fiscal del distrito del condado de Los Ángeles, el lanzador mexicano discutía con su esposa cuando “la empujó contra una cerca y la agarró del cabello o hombros”.
El documento precisa sin embargo que “ni las lesiones de la víctima ni los antecedentes penales del acusado justifican presentar un cargo por un delito grave”.
La fiscalía trasladó el caso a la oficina del fiscal de la ciudad para considerar la presentación de delitos menores.
Urías fue arrestado en mayo de 2019 por violencia doméstica, y las Grandes Ligas decidieron suspenderlo 20 partidos, pero la fiscalía de Los Ángeles no presentó cargos formales siempre y cuando siguiera un programa de prevención de la violencia de género durante 52 semanas.
El mexicano fue colocado bajo licencia con goce de sueldo en forma indefinida por las Grandes Ligas tras su arresto en las afueras del estadio BMO en el Exposition Park, sur de Los Ángeles, donde había acudido a presenciar un partido de la MLS.
Una persona reportó el altercado entre un hombre y una mujer, yJulio fue arrestado por el Departamento de Seguridad Pública bajo sospecha de lesiones corporales a su cónyuge o conviviente.
La licencia con goce de sueldo se aplicó al amparo de la política de las Grandes Ligas sobre violencia doméstica, agresión sexual y abuso infantil adoptada con el sindicato en 2015, como un eventual primer paso hacia una suspensión. Un jugador puede cobrar pero no jugar.
Aún sin ser encontrado culpable, las Grandes Ligas pueden suspender al pelotero de 27 años si concluye que quebrantó el reglamento de violencia doméstica.
Urías se declaró agente libre tras la última Serie Mundial luego de jugar 8 años con los Dodgers.
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