Durante la mañanera de este martes en Palacio Nacional, el Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que tiene información de que el proceso de compra-venta de Citibanamex va muy bien, al ser cuestionado sobre si el segundo banco más importante de México pasaría a manos del empresario Germán Larrea.
Dijo que "uno de los posibles compradores es Grupo México, y nosotros les hemos transmitido a los consejeros, directivos de Citibanamex, que no hay de parte del Gobierno de México ninguna inconformidad".
"No hay de parte nuestra ningún problema en que se lleve a cabo esa operación, y ya definimos con anticipación cuáles eran las reglas", recordó el Presidente.
"Primero, que fuese capital mexicano, eso se está cumpliendo; segundo, que estén al corriente en el pago de sus impuestos, eso creo que también se está cumpliendo, y tercero, que se pague el impuesto por la operación.
López Obrador mencionó que, cuando se vendió ese banco en la época de Fox y estando de Secretario de Hacienda Francisco Gil, que había trabajado de subsecretario de Hacienda con Salinas y después fue empleado de Roberto Hernández", quien se convirtió en el principal accionista de Banamex, "llega su empleado Francisco Gil a la Secretaría de Hacienda y llega Fox, que había estado en la escuela con él, además le había ayudado en la campaña, pues se les hizo fácil no pagar impuestos".
Precisó que vendieron Banamex a Citigroup, "tenían que haber pagado como 3 mil millones de dólares de impuestos y no pagaron ni un centavo". Ahora "Citibanamex está vendiendo de nuevo el banco y, pues ya son otros tiempos, ahora tienen que pagar los impuestos."
El mandatario también expresó que Banamex tiene un acervo cultural que es de México, y no se puede ir al extranjero. tiene edificios, colección de arte, y todo eso tiene que quedar en la nación, agregó.
Resumió el presidente diciendo que ve "con buenos ojos el que se lleve a cabo esa operación, porque se están cumpliendo con estos elementos, factores, no condiciones, ni siquiera requisitos, sino recomendaciones."
Finalmente, López Obrador concluyó manifestando que sólo falta revisar la parte del pago de impuestos, y que si van a ser los del Grupo México, no va a haber ningún problema, aclarando que "tenemos diferencias con ellos, pero eso es otro asunto, ese es otro cantar; en el caso de la venta o compra del banco no hay problema".
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