Rusia busca explicar sus injustificados ataques a la infraestructura civil de Ucrania y según si canciller, son consecuencia de que Estados Unidos y la OTAN suministran armas a Kiev y entrenan a los soldados ucranianos. Ahora resulta que por esto destruyen fuentes de suministro de energía eléctrica y agua, acciones que pueden matar a muchísimas personas por frío en tiempos invernales.
Moscú respondió así a las duras críticas sobre los bombardeos a infraestructuras civiles, de suministro eléctrico o de agua en pueblos y ciudades, y de acuerdo con el imaginativo canciller, Serguéi Lavrov, desactivaron "instalaciones energéticas que les permiten a ustedes, a Occidente, alimentar a Ucrania con armas mortales para matar a los rusos; así que no me digan que Estados Unidos y la OTAN no están involucrados en esta guerra”, como si las actividades bélicas fueran en Rusia.
“Ustedes están directamente involucrados no sólo suministrando armas, sino también entrenando al personal militar", argumentó Lavrov.
Los ataques rusos en Ucrania que han tenido como objetivo barriadas residenciales y han provocado las muertes de numerosos civiles, han sido ampliamente condenados por la comunidad internacional
La OTAN se comprometió a seguir enviando armas de última generación a Ucrania, incluidos sistemas avanzados de defensa aérea, mientras la lluvia de misiles rusos pretende “desconectar las instalaciones de energía que les permiten seguir inyectando armas mortales en Ucrania para matar a los rusos”.
Según Lavrov, en videoconferencia de medios, “no deben decir que Estados Unidos y la OTAN no tienen parte en esta guerra, ustedes participan directamente en ella, y no sólo al proporcionar armas, sino también entrenar al personal. Están entrenando a su ejército en su territorio, en los territorios de Gran Bretaña, Alemania, Italia y otros países”.
Cerca de la mitad de la red eléctrica de Ucrania seguía el jueves fuera de servicio, una semana después de los últimos bombardeos rusos contra infraestructuras energéticas, indicó el operador privado DTEK.
Rusia, tras haber sufrido varios reveses militares en el terreno, empezó en octubre a atacar instalaciones energéticas ucranianas, lo que provocó graves daños y privó a millones de ucranianos de electricidad cada día, a las puertas del invierno.
El 24 de noviembre, los últimos bombardeos contra estos objetivos dejaron a oscuras y en el frío a regiones enteras del país, incluyendo Kiev, la capital. Para tener un poco de luz o de calor durante los múltiples cortes de electricidad diarios, los ucranianos recurren a sistemas alternativos, como las velas o los generadores.
ความคิดเห็น