Luego de varios días de no cruzar llamada telefónica, el premier judío Benjamín Netanyahu, habló nuevamente con el presidente estadounidense Joe Biden y le reiteró que no pondrá fin a su guerra contra Hamás hasta eliminar al grupo islamsta.
En un comunicado emitido por su oficina, Netanyahu dijo que habló con Biden "de los últimos acontecimientos en la guerra, incluido el compromiso de Israel de lograr todos los objetivos: la eliminación de Hamás, la liberación de todos nuestros rehenes y la promesa de que Gaza ya no representará una amenaza para Israel.
La Casa Blanca manifestó en un comunicado que “el presidente Biden habló con el primer ministro Benjamin Netanyahu de Israel para tratar los últimos acontecimientos en Israel y Gaza, incluida la situación en Rafah y los esfuerzos para aumentar la asistencia humanitaria a Gaza”.
Washington considera un "error" llevar a cabo una gran operación terrestre en el punto más al sur del enclave palestino y considera que llevará a más muertes de civiles.
Jake Sullivan, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, aseguró que gran parte de la conversación tuvo que ver con los planes israelíes de ocupar Rafah, sobre los que Biden se mostró "profundamente preocupado", debido a que pondría a más de un millón de refugiados en grave riesgo y sin escapatoria aparente, además de que este lugar es la vía de entrada de ayuda humanitaria desde Egipto.
Biden declaró en días pasados que la presencia de Netanyahu “hace más daño a Israel que ayudar” y el líder de la mayoría demócrata en el Senado estadounidense, Chuck Schumer, pidió elecciones en Israel para forzar la salida del político ultraderechista del Gobierno de coalición de Israel.
Mientras tanto, el secretario general de la ONU, António Guterres, exigió a Israel y a la comunidad internacional actuar de inmediato contra la hambruna en Gaza, después de que se conociera que la mitad de su población, o 1,1 millones de personas, padece “inseguridad alimentaria catastrófica”.
Se trata del nivel más grave de inseguridad alimentaria, según el informe hecho publicado por la Clasificación Integrada de Fases de Seguridad Alimentaria, un barómetro mundial en esta materia, y Guterres subrayó que este porcentaje es el mayor “nunca registrado en ninguna parte”, según este sistema de medición de la ONU, y añadió que, además, es un desastre “enteramente” causado por el hombre.
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