La recuperación económica mundial va a continuar en lo que resta de 2021, de acuerdo con las proyecciones dadas a conocer este miércoles por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, la aparición de factores de riesgo como inflación, falta de mano de obra, aprovisionamiento y la amenaza de nuevas olas epidémicas como lo es la variante ómicron, han moderado las expectativas.
El informe de Perspectivas Económicas de la OCDE, baja en 2 décimas su previsión de crecimiento para el mundo en 2021, y lo ubica en un rango de 5,6 %, que no es una reducción brusca pues además, sube ligeramente sus expectativas para 2022, al 4,5 %.
Asimismo, para 2023, la estimación se ubica en 3,2 %, similar al que se tenía en los años previos a la pandemia del coronavirus
Sin embargo, hay casos como el de Estados Unidos, donde la OCDE, que ya había reducido en septiembre pasado sus estimaciones de crecimiento para la Unión Americana, lo vuelve a hacer ahora y las fija en 5,6 %, una baja de 4 décimas.
Asimismo, y en el caso de la otra potencia económica que es China, también se reduce la proyección de crecimiento en 4 décimas para ubicarla en 8,1 %.
También baja en una décima las protecciones de la Eurozona, donde destaca el caso de Francia, que debe crecer 6,8 % en 2021, es decir, 5 décimas más que lo anticipado al final del verano, así como Reino Unido, en donde se espera un incremento del PIB del 6,9 % este año
Sobre Latinoamérica, una de las regiones más afectadas por el coronavirus, la OCDE mejora las perspectivas de Argentina respecto a las de septiembre, con una subida de la actividad del 8 % en 2021. En el caso de México, la previsión es que cerrará 2021 con un crecimiento de 5.9%, en tanto que para 2022 el PIB aumentará en 3.3%.
México tenía en el reporte previo de la OCDE una previsión de crecimiento económico de 6.3% para 2021 y de 3.45 para 2022, por lo que sus proyecciones fueron ajustadas a la baja.
De acuerdo con los autores del informe, ante los desequilibrios en la recuperación por países, la prioridad continúa siendo la vacunación, que es lo que va a permitir salvar vidas, mantener ingresos, fronteras abiertas y levantar restricciones
Preocupa especialmente el repunte de la inflación, causada en gran medida por el aumento de precios de la energía, cuyas proyecciones han tenido que revisarse de forma repetida al alza en el último año. La OCDE confía en que el pico en el conjunto de sus países miembros se alcance a finales de 2021, con un ritmo interanual próximo al 5 %, para bajar al 3,5 % un año después y al 3 % en 2023.
