Guerra en Medio Oriente podría afectar agenda de la Cumbre del G7

Este domingo inicia en Canadá una nueva edición de la Cumbre del G7, la cual en esta ocasión se desarrollará en un mundo convulsionado por una profundización en la guerra de Rusia contra Ucrania, el conflicto bélico entre Israel e Irán, el genocidio judío en Gaza y la guerra comercial de Estados Unidos contra el mundo.

El encuentro de las potencias económicas occidentales y países invitados se llevará a cabo en la localidad canadiense de Kananaskis entre el domingo y el martes.

La agenda confeccionada por Canadá, en donde, entre otras cosas, se busca no tener fricciones con el presidente convlcto estadounidense, Donald Trump, se suma ahora el estallido bélico judío-irani entre Israel e Irán, que podría incendiar la región.

Ooco antes de viajar a Canadá, el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, condenó el ataque israelí contra Irán y lo calificó de «totalmente intolerable» .

A su vez, primer ministro canadiense, Mark Carney, el anfitrión de la cumbre, se reunió de emergencia con su Consejo Nacional de Seguridad para analizar la situación que, dijo, «amenaza la paz regional».

Los países del G7 han respaldado el derecho de Israel a defenderse, pero en los últimos meses, el rumbo de la agresión israelí en la Franja de Gaza que ya ha causado la muerte a más de 55 mil palestinos, ha generado algunas críticas entre algunos miembros del grupo.

Reino Unido, Francia y Canadá, en una medida inusual, sancionaron a 2 ministros israelíes por incitar a la violencia de los colonos judíos contra palestinos, decisión criticada por Estados Unidos.

La organización Human Rights Watch solicitó al G7 que durante la cumbre de Kananaskis «se comprometa a adoptar medidas concretas para detener las atrocidades israelíes en los territorios ocupados palestinos».

Bruno Stagno, director de campañas de HRW, añadió que «la doble vara de medir de muchas naciones del G7 ha dado, durante meses, luz verde a Israel para intensificar la destrucción de Gaza y el asesinato, el hambre y el desplazamiento forzoso de su población».

Los líderes de los países del G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido) arrivsn hoy a Kananaskis, una comunidad en las Montañas Rocosas a unos 90 kilómetros al oeste de Calgary, y a ellos se sumarán los presidentes de México, Brasil, Ucrania, Corea del Sur y Sudáfrica, así como los primeros ministros de Australia y la India, invitados por Canadá.