Futuro marcado por clima, demografía y tecnología, prevé la Unicef para la infancia

Un informe de la Unicef denominado “Estado Mundial de la Infancia 2024”, estima que los niños y las niñas se van a ver profundamente afectados por 3 fuerzas globales: el cambio demográfico, la crisis climática y el impacto de las tecnologías, hacia el año 2050.

Según las previsiones, en 2050 la población infantil ascenderá a unos 2 mil 300 millones, cifra similar a la actual, y es factible que la proporción de niños disminuya en todas las regiones del mundo, dejando una población envejecida en regiones donde tendrán que equilibrar el reparto de recursos entre esta última y la población infantil.

Sin embargo otras áreas disfrutarán de un “dividendo demográfico” en el que aumenta la población en edad de trabajar, por lo que se puede destinar más recursos a la infancia. África subsahariana y el sur de Asia serán las áreas que acumularán el mayor número de niños, lo que supondrá dificultades a la hora de satisfacer sus necesidades.

Casi la mitad de los niños y niñas alrededor del mundo, unos 1.000 millones, viven en países en riesgo climático y ambiental, que afectan tanto a su salud como a sus proyectos vitales, vinculados a la educación, la sanidad y las infraestructuras.

Catherine Russell, titular de la agencia de Naciones Unidas para la infancia, explica que “las decisiones que toman hoy los líderes mundiales, o que dejan de tomar, definen el mundo que los niños heredarán.”.

En comparación con la década de los 2000, los niños de ahora se enfrentan 8 veces más a olas de calor extremas; 3 veces más a inundaciones de ríos; y casi el doble de veces a incendios forestales extremos. El informe de Unicef sostiene la necesidad urgente de emprender acciones medioambientales específicas para proteger a los niños al reducir las emisiones, transicionar hacia energías limpias y aplicar medidas de adaptación al cambio climático.

Por otro lado, En 2024, más del 95% de las personas en países con ingresos altos tienen conexión a internet contra 26% de países con menos ingresos, lo que evidencia las desigualdades tecnológicas entre regiones. Más aún hay un gran porcentaje de la juventud en países con ingresos bajos y medios que tienen mayores dificultades para acceder a las competencias digitales, especialmente en el plano educativo y laboral.

El informe aporta algunas buenas noticias, como las relativas a la tasa de supervivencia de los recién nacidos, que sube 4 puntos porcentuales y alcanzarán un 98% en 2050, según Unicef

“Crear un futuro mejor en 2050 requiere más que imaginación, requiere acción. Décadas de progreso, especialmente para las niñas, están amenazados”, advierte Russell.