Frena juez estadounidense deportaciones a terceros países sin posibilidad de apelación

Los planes del gobierno de Estados Unidos de deportar a cuánto migrante indocumentado se le ponga por delante, siguen sufriendo retrasos porque jueces decididos a ni dejarse intimidar para llevar a cabo su trabajo.

Un juez federal detuvo temporalmente las acciones que realiza al gobierno del convicto presidente Donald Trump de deportar a personas que han agotado las apelaciones legales a países distintos al suyo, sin que primero se les permita argumentar que esto pondría en peligro su seguridad.

El juez Brian E. Murphy, determinó que las personas con órdenes finales de deportación deben tener “una oportunidad significativa” para argumentar que ser enviadas a un tercer país representa un nivel de peligro que merece protección.

Está orden se mantendrá vigente hasta que el caso avance a la siguiente etapa de argumentos, y representa un revés para el gobierno que ha enviado personas a países como Panamá, Costa Rica y El Salvador cuando le es difícil deportarlas a sus países de origen.

En algunos casos, un juez puede determinar que el país de origen de una persona es demasiado peligroso, pero las autoridades pueden enviarlas a un tercer país.

Los abogados del gobierno argumentaron que una suspensión temporal interferiría con la aplicación de las leyes de inmigración, pero Murphy, nombrado juez por el presidente Joe Biden, falló a favor de grupos activistas, incluida la Alianza Nacional de Litigios de Inmigración, que demandó a nombre de personas que fueron transferidas a terceros países o temían ser enviadas pronto.