De acuerdo con el diario francés Le Figaro, la fuerte sequía que afecta al país podría derivar en una eventual escasez de leche, según la Federación Nacional de Sindicatos Agrícolas de Francia.
Según el presidente de la comisión económica de la Federación, Yannick Fialip, los animales "que suelen estar en los prados en esta época del año no tienen nada que comer".
Explica que "para hacer leche, se necesita forraje, principalmente alfalfa y maíz, que no han crecido mucho este año. Así que corremos el riesgo de quedarnos sin leche este otoño e invierno".
Fialip, señala que el precio del producto en Francia es 20 % más bajo que el que se paga a otros productores europeos, sobre todo en Alemania y Países Bajos, y ante esta situación, los consumidores temen un aumento de los precios de leche mientras que los ganaderos exigen una "revisión" para "garantizar la sostenibilidad de la producción".
En esta situación, los productores de leche han pedido activar el llamado "fondo de calamidad", que permite a los agricultores comprar forraje subsidiado en un 50 % por el Gobierno francés.
De seguir esta situación, los franceses podrían verse obligados a pagar más por el lácteo, o a tener menos litros de leche en sus refrigeradores y mesas muy pronto
