Expresidente peruano Alejandro Toledo podría terminar sus días en una cárcel: sentenciado 20 años

Aceptar sobornos de parte de la tristemente célebre constructora brasileña Odebrecht tendrán como consecuencia para el expresidente peruano Alejandro Toledo pasar posiblemente el resto de sus días en una cárcel 

Toledo, quien gobernara Perú entre los años 2001 y 2006 fue condenado a 20 años y 6 meses de prisión por el Segundo Juzgado Penal Colegiado de la Corte Superior Nacional del país sudamericano.

Fue encontrado culpable por los delitos de colusión y lavado de activos, al recibir un soborno de 35 millones de dólares de Odebrecht a cambio de entregarles obras de la carretera Interoceánica Sur.

La jueza Inés Rojas Contreras, encargada del expediente, dió lectura a la sentencia, que consta de 11 años y 6 meses de cárcel por lavado de activos en unos 9 años por colusión, además de inhabilitación de 3 años para ejercer cargos públicos.

Toledo es el primer expresidente preso y condenado por el caso conocido como "Lava Jato", el mayor escándalo de corrupción en Perú que se estalló en 2016 e involucra a varias figuras políticas del país.

En audiencia previa al anuncio del fallo en el juicio contra Toledo, el Poder Judicial dio más detalles sobre este caso investigado por la Fiscalía de la Nación, y para el Poder Judicial presidido en este asunto por la jueza Zaida Pérez Escalante, de 2004 a 2006 hubo un "perjuicio al Estado defraudándolo" al recibir el soborno de la empresa. 

El fiscal José Domingo Pérez había pedido una condena por 20 años y 6 meses, así como 3 años de inhabilitación para desempeñar la función pública, y eso otorgó la jueza.

La semana pasada, en su alegato final, Toledo reiteró su inocencia, y pidió que lo dejen "curar o morir" en su casa tras recordar que padece cáncer y problemas del corazón.

"Si esto va a continuar, lo único que les pido, por favor, déjenme defenderme desde mi casa, quiero ir a una clínica privada", expresó Toledo, y mencionó que ya estuvo 3 años bajo arresto domiciliario en Estados Unidos antes de su extradición a Perú.

El expresidente permanece recluido en el penal presidencial de Barbadillo, llegó de ser extraditado por Estados Unidos en abril del 2023. Su esposa Eliane Karp está prófuga de la Justicia peruana.