Este primero de abril entro en vigor en Alemania la ley que legaliza el uso y consumo recreativo de cannabis de manera parcia y desde este lunes, personas mayores de 18 años podrán cultivar en casa un máximo de 3 plantas de cannabis para autoconsumo o poseer 50 gramos de flores secas en su espacio privado. En el espacio público estarán permitidos 25 gramos.
El ordenamiento fue procesado en medio de fuertes debates, lo que aprovecharon varias personas para reunirse en Berlín y celebrar el suceso fumando marihuana. Se estima que unos mil 500 berlineses se reunieron durante la medianoche frente a la Puerta de Brandeburgo junto con una maqueta de un metro de altura de una hoja de cáñamo y carteles donde expresaban su derecho a consumir mariguana.
La nueva ley precisa que no está permitido fumar en parques infantiles, escuelas, instalaciones deportivas incluidos estadios de fútbol, e instalaciones para niños y jóvenes, y a la vista de ellos. Más aún, tampoco se podrá consumir cannabis entre las 07.00 y las 20.00 en zonas peatonales.
Asimismo, desde el 1 de julio será legal la creación de clubes con hasta 500 miembros que podrán cultivar el cannabis de forma colectiva y no comercial e intercambiarlo entre ellos para el consumo privado. La distribución y la venta siguen prohibidas, y tampoco está permitido conducir un vehículo a motor bajo los efectos de la droga.
No existe un límite legal para el cannabis al volante como con el alcohol. Ante el vacío legal, una comisión de expertos propuso una concentración máxima de 3,5 nanogramos por mililitro de suero sanguíneo para el principio activo THC.
Cualquiera que supere los gramos para uso personal permitidos se enfrenta a sanciones de hasta 30 mil euros o hasta penas de prisión.
Quienes se oponen a la legalización estiman que el límite de posesión de cannabis permitido por la ley es demasiado elevado, y entidades como la Asociación Médica Alemana señala que 50 gramos al mes “corresponde a un consumo de alto riesgo y conduce a trastornos relacionados con el cannabis”.
Por su parte, el Ministerio de Sanidad sostiene en cambio que el cannabis legal también debe estar disponible en mayores cantidades si se quiere socavar al mercado negro ilegal. El ministro de Justicia, Marco Buschmann, agrega que la legalización aliviará a medio plazo la presión sobre la Justicia y la policía.
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