Donald Trump quiere eliminar hasta los indultos de Biden

Joe Biden, expresidente de los Estados Unidos

Para nadie es ya un secreto la cacería que lleva a cabo el presidente convicto de Estados Unidos Donald Trump, contra todo lo que huela, recuerde o represente Joe Biden.

El mandatario delincuente afirmó que la mayoría de los indultos que firmó el expresidente demócrata antes de dejar el poder no son válidos, argumentando que utilizó para la firma el 'autopen', que es un dispositivo que reproduce automáticamente una firma manuscrita, sin su conocimiento o aprobación directa.

Hasta ese punto ha llegado el ocupante de la Casa Blanca, quien gobierna a base de ordenes ejecutivas y sin oposición alguna, no de la población, ni del poder legislativo, y tampoco del poder judicial con la excepción de algunos jueces cuyas resoluciones se opone a acatar Washington.

Trump dijo en su cuenta de Truth Social que "los indultos que el dormilón Joe Biden concedió al 'Comité No Seleccionado de Matones Políticos', y a muchos otros, se declaran nulos, vacantes, y sin ningún vigor o efecto, debido al hecho de que fueron hechos por 'autopen'. En otras palabras, Joe Biden no los firmó, pero, lo que es más importante, no sabía nada de ellos" 

Más aún, el republicano acusó a los miembros del Comité Selecto de la Cámara de Representantes, a quienes tachó de "matones políticos", de "destruir y eliminar todas las pruebas" de su investigación, dejando entrever  que podrían enfrentar un escrutinio legal..

En su fobia por Biden, quien lo derrotó en la elección presidencial del 2020 por más que lo niegue, Trump añadió que "lo cierto es que probablemente fueron responsables de los documentos que se firmaron en su nombre sin el conocimiento ni el consentimiento del peor presidente de la historia de nuestro país, el corrupto Joe Biden".

Biden conmutó en enero pasado antes de dejar la presidencia, las sentencias de unas 2 mil 500 personas, convirtiéndose el mandatario con la mayor cantidad de indultos y conmutaciones de penas emitidas en la historia de Estados Unidos, beneficiando sobre todo a condenados por delitos no violentos relacionados con drogas y personas a las que Trump había amenazado con procesar, entre ellas, representantes del Gobierno, directivos médicos y agentes de policía. 

De igual forma, Trump pretende retirar la protección del Servicio Secreto para los hijos del expresidente.