
El Gobierno nicaragüense continúa con su represión hacia el sector religioso, y está vez, Daniel Ortega, canceló la personalidad jurídica a la Asociación Compañía de Jesús de Nicaragua, es decir, a los jesuitas.
Más aún, ordenó expropiar bienes, que incluyen una universidad y 2 colegios, de una Asociación registrada desde mayo de 1995, y cuya disolución fue aprobada por la ministra nicaragüense de Gobernación, María Amelia Coronel Kinloch, a la sazon, empleada del presidente Ortega.
El acuerdo ministerial fue publicado ya en el diario oficial nicaragüense La Gaceta.
Dicho acuerdo se publicó una semana después de que fuesen congeladas las cuentas bancarias e inmovilizara las propiedades de la jesuita Universidad Centroamericana, uno de los centros de estudios privados más prestigiosos de Nicaragua, y que fue acusada de delitos de terrorismo.
Está Universidad, uno de los últimos sitios de libertad de pensamiento en Nicaragua, negó los "señalamientos infundados" de las autoridades, y decidió suspender actividades.
El papá Francisco pertenece a esta Compañía de Jesús, y cuenta con más de 16 mil miembros, la orden religiosa masculina más grande de la Iglesia católica.
En su página web, asegura que son
"pastores, maestros y capellanes. También somos médicos, abogados y astrónomos, entre otras muchas funciones en la Iglesia y la sociedad. En la variedad de nuestros ministerios, atendemos a la totalidad de la persona: cuerpo, mente y alma. Y especialmente en nuestros ministerios de educación, buscamos nutrir 'hombres y mujeres para los demás'".
El acuerdo ministerial publicado hoy, apunta que la cartera de Gobernación sostuvo que la Asociación Compañía de Jesús de Nicaragua fue declarada ilegal por "incumplimiento a las leyes", debido a que tenía su junta directiva vencida desde el 27 de marzo de 2020 y no reportaron sus estados financieros del período fiscal entre 2020 y 2022.
Ese fue el pretexto, y Gobernación la acusó de obstaculizar "el control y vigilancia de la Dirección General de Registro y Control de Organismos sin Fines de Lucro" de esa cartera, de no promover políticas de transparencia en la administración y manejo de la Asociación, y que el ente regulador desconocía "las actividades que realizan, la ejecución de sus proyectos y si estos son acorde a sus objetivos y fines".
Respecto a la liquidación del patrimonio del organismo, que incluye los colegios Loyola y Centroamérica, Gobernación dijo que corresponderá a la Procuraduría General de la República realizar el traspaso de los bienes muebles o inmuebles a nombre del Estado de Nicaragua. Un despojo más.
Las relaciones del Gobierno del presidente Ortega y la Iglesia católica viven momentos de gran tensión, y el papa Francisco ya calificó de "dictadura grosera" al Gobierno sandinista, y señalando en entrevista con Infobae, "un desequilibrio de la persona que dirige" el país centroamericano.
A ver cómo reacciona ahora.
Comments