En estos días, Israel ha puesto en tela de juicio las cifras de muertos en la guerra contra Hamás en Gaza pero este martes, pero la Organización Mundial de la Salud se encargó de validar los números ofrecidos por autoridades palestinas de más de 35 mil fallecidos.
El Ministerio de Salud de Gaza actualizó la semana pasada su desglose de los 35 mil muertos desde el 7 de octubre, diciendo que, hasta ahora, unos 25 mil han sido completamente identificados, y más de la mitad eran mujeres y niños. El reporte señala además que el resto está en proceso de serlo.
Las agencias de Naciones Unidas han dado por ciertas las cifras que ofrecen las autoridades palestinas, algo que provocó acusaciones de parte de Israel, quienes afirman que las autoridades palestinas habían estimado incluso que más del 70% de los muertos eran mujeres y niños.
Oren Marmorstein, portavoz del Ministerio de Exteriores de Israel, acusó a los militantes palestinos de Hamás de manipular las cifras, asegurando que "no son exactas y no reflejan la realidad sobre el terreno". Sin embargo, el portavoz de la OMS, Christian Lindmeier, expuso en rueda de prensa en Ginebra, que “los datos no tienen nada de malo, los datos globales siguen siendo los mismos", respondiendo así a las preguntas sobre el número de víctimas.
Agregó además que "el hecho de que tengamos 25 mil personas identificadas es un paso adelante", y comentó que basándose en su propia extrapolación de los datos palestinos, alrededor del 60% de las víctimas eran mujeres y niños, pero muchos cuerpos enterrados bajo los escombros probablemente entrarían en estas categorías cuando finalmente fueran identificados.
Lindemeir sostuvo que "ahora, el Ministerio de Sanidad de Gaza va más lejos e identifica cada cuerpo, cada muerte, les da nombre a estas personas e informan a las familias", asegurando que el proceso de identificación de cadáveres es muy penoso, pues incluye la identificación de cuerpos carbonizados, también de niños.
Lindmeier explicó que la identificación y registro de personas muertas se realiza en instalaciones médicas o en morgues, y "no comprende a las que están en fosas comunes, debajo de edificios destruidos o que murieron en áreas que están fuera del alcance de los equipos de socorro debido a la intensidad del conflicto".
El también el portavoz de la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria (OCHA) de Naciones Unidas, Jens Laerke, enfatizó que "no hay nada que corregir" en relación con el número de víctimas.
Los voceros de la ONU, advirtieron además contra la aceptación de la discusión en torno a las cifras proporcionadas por las autoridades palestinas como una distracción de los horrores de la guerra.
Horas antes, se había pronunciado también, ante reporteros en Nueva York, el portavoz de la ONU Farhan Haq, reconociendo que los equipos de la ONU en Gaza no han podido verificar de forma independiente las cifras del Ministerio de Salud de Hamás, dada la guerra en curso y el gran número de muertes, pero, "desafortunadamente, tenemos la triste experiencia de coordinar con el Ministerio de Salud las cifras de víctimas cada pocos años, para incidentes con grandes víctimas en Gaza, y en el pasado sus cifras han demostrado ser generalmente precisas".
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