Confirma Naciones Unidas ataques israelíes con fósforo blanco contra Gaza: 70% de muertes en la Franja, de niños

Un informe publicado hoy por la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos asegura que Israel ha utilizado fósforo blanco, químico que puede ocasionar heridas “horribles y dolorosas”, en al menos 24 ocasiones a lo largo de poco más de un año de conflicto armado en la Franja de Gaza.

El hallazgo abona a las cada vez mayores evidencias de que el régimen judío está cometiendo   genocidio y crímenes contra la humanidad en el enclave palestino.

El reporte se centra en medio año de guerra entre noviembre de 2023 y abril de 2024, y da cuenta de al menos 6 ataques con fósforo blanco en la capital de Gaza, 9 en el centro de la Franja y 3 más en Jan Yunis, algunos perpetrados en campos de refugiados.

La oficina de la ONU encabezada por Volker Türk apunta en el documento de 32 páginas, que recogió testimonios de profesionales médicos en Gaza y “verificó un incidente el 25 de diciembre en el que un bebé resultó quemado por fósforo blanco en una escuela en el campo de Al Bureij”,

El fósforo blanco no es considerado arma química, pero su uso debería estar prohibido en virtud de las convenciones que vetan la utilización de armamento “con efectos indiscriminados” o el que causa “sufrimiento innecesario y heridas superfluas”, según recuerda el informe.

Organizaciones como Amnistía Internacional o Human Rights Watch, ya habían denunciado a Israel por utilizar fósforo blanco en Gaza, siendo uno de los primeros documentos de Naciones Unidas que contiene esta acusación en la actual guerra, sin que nadie haya hecho algo por sancionar al estado judío.

En el conflicto ocurrido en Gaza de principios de 2009, un Informe bautizado con el nombre de Goldstone por una misión de investigación de la ONU también acusó a Israel de utilizar esa sustancia incendiaria.

Según la Organización Mundial de la Salud, el fósforo blanco arde de manera instantánea cuando entra en contacto con el oxígeno, y es difícil de extinguir, además de que se adhiere a la piel y la ropa, causando quemaduras “profundas y graves, al penetrar incluso a través de los huesos”. 

El documento destaca que, en los ataques verificados contra edificios residenciales, los niños fueron las principales víctimas, y subraya que el perfil demográfico de los fallecidos en viviendas demuestra el total desinterés de las fuerzas israelíes por evitar pérdidas de vidas civiles.

Casi el 70% de los fallecidos en los ataques de Israel contra la Franja de Gaza son mujeres y menores de edad, según el informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Los continuos ataques contra la población civil, según el texto, "muestran una aparente indiferencia ante la muerte de civiles y el impacto de los medios y métodos de guerra seleccionados". Según el organismo, "las víctimas mortales verificadas más representadas" son los menores.

Alrededor del 80% de las muertes verificadas, continúa la nota, tuvieron lugar en edificios residenciales o viviendas, de las cuales un 44% eran menores y un 26% mujeres. Los datos del ente muestran que el alto número de víctimas mortales en ataques se explica principalmente por "el uso por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel de armas con amplia zona de impacto en áreas densamente pobladas".