La intransigencia del gobierno de Israel para llegar a un alto al fuego con el grupo islamsta Hamás, sacó el sábado a las calles de varias ciudades judías a miles de personas que exigen al gobierno del derechista Benjamin Netanyahu negociar la tregua y facilitar la liberación de los rehenes que siguen vivos.
Decenas de miles de judíos participaron en las protestas masivas, y tanto solo en Tel Aviv, más de medio millón de personas se han sumado a la manifestación más grande desde el estallido de la guerra en Gaza el 7 de octubre del año pasado.
Hace unos días se llevó a cabo la primera huelga general nacional y de diversos actos de protestas.
Gil Dickman, primo de la rehén ya sin vida Carmel Gal, dijo que ella "aguantó 8 largos meses, a través del hambre, el miedo mortal y los bombardeos... y en junio, cuando un acuerdo estaba nuevamente sobre la mesa, ella estaba nuevamente en la lista. Ella [y los otros rehenes asesinados] deberían haber regresado a casa. ¡vivos!".
El cuerpo de Carmel fue hallado la semana pasada junto a otros 5 rehenes en un túnel de la ciudad de Rafah, en la Franja de Gaza, y los militares los encontraron días después de ser "ejecutados por Hamás", de acuerdo con la autopsia.
Esto incrementó el malestar de la sociedad israelí contra su Gobierno, a quien culpan de las muertes por no haber firmado un acuerdo de alto el fuego con el grupo palestino.
En Jerusalén, también se reunieron manifestantes frente a la residencia del primer ministro Nentanyahu, portando banderas amarillas que representan el movimiento por la liberación de rehenes retenidos por Hamás.
"Las mentiras del régimen no traerán seguridad”, reclamaron, a un premier señalado como culpable del ataque de Hamás hace 11 meses cuando militantes palestinos entraron a territorio israelí y mataron a mil 200 personas.
Los manifestantes piden el fin de la guerra, otro gobierno y huelga general para presionar por un acuerdo.
Comments