La sesión número 76 de la Asamblea General de Naciones Unidas adoptó por consenso una resolución que ordena que se reúna siempre que se produzca un veto en el Consejo de Seguridad
La Asamblea aprobó por consenso la resolución que crea un mandato permanente para que este órgano, donde están representados los 193 Estados miembros, sea convocado en un plazo de 10 días laborables, cada vez que se produzca un veto en el Consejo de Seguridad.
La resolución tuvo unos 80 copatrocinadores, incluyendo Estados Unidos y Gran Bretaña.
La reforma del Consejo de Seguridad que según la carta de la ONU es el encargado de garantizar la paz y la seguridad internacionales, ha sido discutida y debatida por más de 40 años y fue el tema central antes y después de la aprobación de la resolución el martes.
Liechtenstein, que preparó el texto, lo presentó en el hemiciclo, y su embajador Christian Wenawese, dijo que comenzaron a trabajar en esta iniciativa junto con un grupo de Estados “hace más de 2 años, debido a la creciente preocupación de que el Consejo de Seguridad tiene cada vez más dificultades para llevar a cabo su trabajo”, y que el “aumento del uso del veto no es más que la expresión más evidente”.
“Por lo tanto, opinamos que los miembros en su conjunto deben tener voz cuando el Consejo de Seguridad no pueda actuar, de acuerdo con las funciones y poderes de esta Asamblea reflejados en la Carta de las Naciones Unidas, en particular su artículo 10.
El poder de veto viene con la responsabilidad de trabajar por la consecución de los propósitos y principios de la Carta de la ONU en todo momento, dijo el embajador Wenawese.
