Cada vez se comportan más como lo hacían los ejércitos alemanes en la Segunda Guerra Mundial:
Luego de la retirada el miércoles de tropas judías de la ciudad gazatí de Shujaiva, personal de la Defensa Civil de la Franja de Gaza ha rescatado al menos 60 cadáveres, y estima que todavía hay decenas de cuerpos sin vida bajo los escombros de las construcciones destruidas por los agresores..
En conferencia de medios, el portavoz de la Defensa Civil, Mahmud Basal, declaró inhabitable Shujaiya, donde se “carece de elementos vitales, como servicios de salud, electricidad o agua”.
El vocero palestino denunció que hay otras zonas de Shujaiya, barrio en la periferia al sureste de ciudad de Gaza, que son inaccesibles para los equipos de rescate, por el nivel de destrucción o por el riesgo de ataques, en una más de las masacres cometidas por el ejército más moral del mundo.
Expuso que “se halló una extensa destrucción, toda la zona se ha convertido en una ciudad fantasma y no es apta para vivir”.
Basal estima que más del 85 % de los edificios de Shujaiya están derrumbados, y la única clínica médica que quedaba en el barrio, y que brindaba servicios médicos a más de 60 mil personas, “fue totalmente destruida”. Testimonios de supervivientes del barrio indican que los militares israelíes atacaron a los desplazados después de darles garantías de seguridad para marcharse. Así operaban en algunas ocasiones los nazis en la Segunda Guerra Mundial
El ejército hebreo concluyó su operación militar en Shujaiya, a donde regresó por segunda vez ante un presunto reagrupamiento de las fuerzas del grupo islamista Hamás, asegurando haber eliminado a unos 150 supuestos milicianos y destruido 8 túneles, algo que no se ha podido probar
Israel terminó la incursión en Shujaiya el mismo día que ordenó la evacuación de la ciudad de Gaza, donde sus tropas también regresaron para combatir con las fuerzas de Hamás. A la población gazatí se le ha pedido que se vaya a la “zona segura” de Deir al Balah, en el centro de la Franja de Gaza, pero las organizaciones humanitarias afirman que no hay un lugar seguro al que ir.
De acuerdo con la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) 9 de cada 10 personas han vivido al menos un desplazamiento en el enclave desde que comenzó la guerra, mientras que la mayoría han tenido que moverse de un lugar a otro en varias ocasiones.
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