
Para 2023, se espera que el crecimiento del PIB se ubique entre 3.1 y 3.5%, con una estimación central de 3.3%, informa el Banco de México en su reporte trimestral.
El ajuste al alza responde, principalmente, a que en el tercer trimestre del año, la actividad económica de México presentó un desempeño mejor al previamente anticipado, como resultado de la resiliencia de la demanda externa y del dinamismo del gasto interno.
Asimismo, para 2024, se prevé un crecimiento de la economía de entre 2.3 y 3.7%, con una estimación central de 3.%, mayor a la de 2.1% del Informe anterior.
La revisión para dicho año se explica, en mayor medida, por la postura fiscal ahora prevista. Además, responde, en parte, a la actualización de las perspectivas de crecimiento para Estados Unidos que sugieren una desaceleración menos pronunciada de la demanda externa que enfrenta México.
Para 2025 se considera un pronóstico de crecimiento de entre 0.7 y 2.3%, con una estimación central de 1.5%.
En materia de empleo, las previsiones para los puestos de trabajo afiliados al IMSS, se ajustaron para 2023 y 2024 respecto del Informe previo.
Para este año que está cerca de finalizar, se prevé una generación de entre 670 y 770 mil plazas.
Para el año que viene se estima una generación de entre 610 y 810 mil empleos nuevos.
Para el 2025 el Banco de México proyecta la creación de entre 570 y 770 mil puestos.
En materia de inflación, el informe trimestral sigue esperando que las inflaciones general y subyacente continúen reduciéndose.
Mientras que en el Informe previo se anticipaba que ambos indicadores se situarían en niveles cercanos a 3% en el cuarto trimestre de 2024, ahora se prevé que ello ocurra en el segundo trimestre de 2025.
Al cierre de este 2023 se proyecta una inflación general de 4.4%, en tanto que para 2024 se estima en 3.4%,
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