Para Hans Kluge, director regional de la Organización Mundial de la Salud para Europa, la vacunación obligatoria contra el coronavirus representa un recurso extremo que solo debe aplicarse cuando otras medidas ya se han agotado.
En conferencia de medios, Kluge destaca que "los mandatos sobre la vacunación son el último recurso en absoluto y solo son aplicables cuando todas las opciones viables para mejorar la aceptación de la vacunación se han agotado".
Varios países europeos analizan obligar a sus habitantes a inocularse contra el coronavirus, y hay casos como el de Austrias en donde se plantean fuertes multas para quien no quiera vacunarse, considerando que la mayor parte de quienes ingresan a los hospitales contagiados, son personas no vacunadas.
Según el dirigente de la OMS, "hay que procurar que la discriminación entre vacunados y no vacunados no provoque tensiones", al advertir del posible impacto de las restricciones en la salud mental de las personas.
Kluge subraya que las vacunas obligatorias son eficaces en casos concretos, y que habría que tener en cuenta su efecto en la confianza de la comunidad.
Finalmente, dijo que es muy pronto para hacer recomendaciones definitivas sobre las medidas preventivas contra la variante ómicron, y la OMS recomienda centrarse en el control de la variante delta, que es la dominante, lo que ayudaría a limitar otras variantes.
